La tumba de María Magdalena Langhans, en la iglesia de Hindelbank (Suiza) constituye una fascinante metáfora de la resurrección, con la imagen de la madre, muerta en el parto, y el hijo, que apenas la sobrevivió, rompiendo la losa y abriéndose paso hacia la vida eterna pic.twitter.com/JRMuvR87zL

— Ligeia (@crimhistoria) July 9, 2020